No sólo es una salsa perfecta para sus papas arrugadas o arrugás, sino que además va genial en las barbacoas de carne, pescado o verduras. Si sale mucha cantidad la podéis mantener en la nevera durante un tiempo y en el congelador hasta tres meses.
Si queréis preparar el mojo como tal y como lo hacen en Canarias, debéis darle al mortero:
Para ello majamos los ajos pelados y picados, los cominos si están en grano, las pimientas o piconas limpias de pepitas y la sal gorda, le damos con brío hasta que formen una pasta suave y homogénea. Una vez que tenemos la pasta, añadimos el pimentón y muy lentamente el aceite de oliva virgen extra y el vinagre hasta que quede una pasta espesa.
Si lo preparamos con la batidora (sólo es un pecado venial y es más rápido) colocaremos todo en un bol y trituramos hasta que quede una pasta parecida a un puré ligero.
Los ingredientes son estos, para hacer más o menos cantidad mantener la proporción y listo.
- 1 cabeza de ajo (unos 8 dientes de ajo aproximadamente) (menos si no nos gusta tan picante)
- 2 pimientas piconas o pimienta de la puta madre (típicas en Canarias, si no las podéis conseguir, os aconsejo unas cayenas grandes, depende del tamaño, 2-3)
- 1 cucharadita de comino en grano (o en su defecto molido)
- 1 cucharada de pimentón dulce o picante (yo empleo la misma cantidad de los dos)
- 20 ml de vinagre
- 150 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal gorda al gusto