El snooker es un juego de billar que se desarrolla en una mesa de doce pies (medidas 3,6 m por 1,8 m), con seis troneras. Se juega con una bola blanca, quince bolas rojas, y otras seis bolas con los siguientes colores y puntos: negra (7), rosa (6), azul (5), marrón (4), verde (3) y amarilla (2). Es una mesa muy grande si se compara con las de pool (billar americano), que suelen ser de ocho o nueve pies.
El objetivo del juego es conseguir más puntos que el rival, embocando las bolas en un determinado orden. Se apunta primero a una bola roja, se mete en uno de los seis agujeros de la mesa, sumando así un punto, y luego se ha de introducir una bola de color, sumando a la puntuación el valor de la bola de color introducida. A continuación volveríamos a atacar una bola roja, y otra de otro color sucesivamente. El árbitro vuelve a colocar en su posición las bolas de color entroneradas.
Una vez embocadas todas las bolas rojas, con sus correspondientes combinaciones, se embocan por orden, de menor a mayor valor, las bolas de color. Ya no volverán a colocarse en la mesa.
Debe tocarse la bola que corresponde o el jugador cometerá una falta que sumará al marcador de su rival cuatro puntos como mínimo (o los puntos de la bola de color que haya provocado la falta). Tampoco es válido dar a una bola de color o a una roja para meter otra de color en combinación, pero sí combinar bolas rojas para meter bolas rojas. Meter una bola que no corresponde es falta. Meter la blanca, también.
Como no es fácil encontrar mesas de snooker en España, una posibilidad de quitarte el gusanillo o para aprender las reglas, es jugar on-line y sin duda la mejor opción es Fly or Die. Recientemente ha mejorado mucho tanto la estética del juego, como la realidad virtual que simula.
Si te gusta este juego, deberías visitar la página oficial de World Snooker, pero si el inglés no es tu fuerte puedes ver otras en castellano: http://snooker147blog.com/ o http://www.zonasnooker.org/.
